Clouds Parting Revealing the Heavens

Devoción del 6 de julio

No temas

Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas. Yo soy el primero y el último, el que vive. Estuve muerto, pero vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

Apocalipsis 1:17-18

Éste es el encargo dado a Juan para que escriba este libro, y su reacción es la que frecuentemente se ve cuando un hombre encuentra al glorioso Dios. Él cayó a sus pies como muerto, anonadado por la admirable naturaleza de Dios. Isaías hace lo mismo cuando ve al Señor alto y sublime, y Sus faldas llenando el templo. Y a Job le pasa lo mismo cuando la sabiduría y la maravilla de Dios se le revelan. A través de la Biblia se produce la misma situación cuando Dios aparece: caer postrado como muerto.

Y la reacción de Jesús es típica, muy característica de Él. Fíjese que hace tres cosas. Primera, ¡tocó a Juan! Posó Su diestra sobre él. Lea los evangelios; Jesús está siempre tocando a la gente. Cuando sanó al leproso le tocó. Cuando abrió los ojos del ciego, puso Sus manos sobres sus ojos. Así que aquí, Jesús le toca. Y luego le tranquiliza: No temas, dijo. No tengas miedo. No soy tu enemigo. Soy tu amigo. Soy el Primero y el Último. [Yo establezco los límites del tiempo y la historia. Todo el mundo debe vivir dentro de los límites que he determinado.] Yo soy el que vive. [Estoy siempre disponible.] Estoy vivo por siempre jamás. [Nunca habrá un momento en que me necesites en el que no esté ahí, disponible para tí.] Y yo tengo las llaves de la muerte y el Hades [la muerte, el enemigo de la vida física; el Hades (o infierno), el enemigo de la vida espiritual. Estoy a cargo de los dos, de las dos fuerzas.] Así que no tienes que tener miedo.

El objeto de este primer capítulo es focalizar nuestra atención sobre Jesús. Él es la figura central de toda la historia. Los cristianos están llamados a vivir como viéndolo a Él, siendo invisible. Esto debería afectarnos todos los días. Él es el que irá con usted a trabajar mañana, el que va a su lado cuando conduce su automóvil, el que vigila mientras usted duerme. Éste es Aquél que selecciona las circunstancias de su vida. Está listo para impartirle, en cualquier momento que usted lo necesite, valor, paz, perdón, sabiduría y ayuda en tiempo de necesidad. Así que Juan cumple el propósito que se le asigna: elevarse y concentrarse en la figura de Jesús, para que podamos conocer Quién es y entender lo que está dispuesto a hacer.

Padre, confieso que, con frecuencia, me arrastran mis miedos. Gracias por cómo me tranquilizas y me alientas para que no tema. Eres digno de mi absoluta confianza. Amén.

Aplicación a la vida

¿Cuáles son las cosas que temo más? Tómese un tiempo para depositar estos miedos a los pies de Aquél que dijo: No temas. Yo soy el Primero y el Último.

Esta devoción diaria fue inspirada por un mensaje de Ray

Tras el escenario de la historia

Lea el mensaje de Ray