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Devoción del 20 de diciembre

Manifestando la verdad

Por el contrario, manifestando la verdad, nos recomendamos, delante de Dios, a toda conciencia humana.

2 Corintios 4:2b

En contraste agudo con la multiplicidad de la maldad está la simplicidad de la verdad. En una gran declaración positiva, el apóstol describe su propia práctica y la práctica de todos los que trabajan en la libertad y dulzura del nuevo pacto. Hay una definición clara y precisa del ministerio del nuevo pacto tal como aparecería en cualquier manifestación pública. El método es único e invariable: manifestando la verdad. Nunca se necesita más. La verdad que hay en Jesús es tan radical, tan sorprendente en la amplitud de su dimensión, tan universal, tan relevante para la vida humana en todas partes, que no se necesita ningún truco sicológico para apoyarla y hacerla efectiva e interesante. Es el tema más cautivador jamás conocido, pues concierne al hombre mismo en sus niveles más profundos.

La meta de la proclamación de Pablo es igualmente clara: nos recomendamos, delante de Dios, a toda conciencia humana. La conciencia, como es entendida aquí, es la voluntad del espíritu humano, en contraste con esa entidad más flexible y fluctuante que es la voluntad del alma. Es lo que un hombre sabe que debería hacer, lo haga siempre o no. Es la profunda percatación que hay dentro de cada persona de lo que hace falta para ser la clase de persona que él o ella quiere ser.

Apelar a la conciencia, por tanto, es captar al hombre completo ―cuerpo, alma y espíritu― mentalmente, emocionalmente y volitivamente. No es aspirar a un acuerdo meramente intelectual, y ciertamente no a un compromiso emocional superficial. Más bien, busca grabar en la conciencia que el compromiso con Jesús es correcto, es decir, conforme a la realidad, y el único camino hacia la verdadera plenitud. No exige, por tanto, resultados inmediatos y visibles, aunque les dará la bienvenida a los que vengan; se contenta con dar tiempo al crecimiento de la semilla que está plantada, y reconoce que los individuos sólo pueden responder adecuadamente a lo que perciben y entienden claramente.

Finalmente, esto ha de ser hecho delante de Dios. Esto significa un conocimiento de que Dios está observando todo lo que se hace, evaluándolo y buscando corregirlo donde sea necesario. Pero la frase sugiere incluso más. Ya que el nuevo pacto es todo viene de Dios, también significa que los ojos del alma están mirando a Dios, para que le proporcione poder y recursos para hacer efectivo el ministerio. La responsabilidad por los resultados se coloca directamente sobre Dios sólo. Esto es lo que da al espíritu del obrero un sentimiento de serenidad y paz. Él o ella es libre de ser un instrumento en las manos de Dios. Ése es el ministerio del nuevo pacto en su divulgación al mundo.

Padre, gracias porque puedo descansar en Ti y con una declaración abierta de la verdad encomendarme a la conciencia de cada persona.

Aplicación a la vida

¿Tiene usted esa serenidad y paz que viene de saber que los resultados de su ministerio están puestos directamente en las manos de sólo Dios?

Esta devoción diaria fue inspirada por un mensaje de Ray

Ch 7: The Enemy Without

Lea el mensaje de Ray