Clouds Parting Revealing the Heavens

Devoción del 4 de julio

El punto focal de la historia

He aquí que viene con las nubes: Todo ojo lo verá, y los que lo traspasaron; y todos los linajes de la tierra se lamentarán por causa de él. Sí, amén. Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.

Apocalipsis 1:7-8

Éste es el punto focal de la historia, ese remoto evento divino, hacia el que toda la creación se mueve. Uno de estos días Él irrumpirá a través del firmamento, como hizo una vez al dejar esta tierra, y vendrá en gloria. Su venida tendrá un impacto universal.

Primeramente, todo ojo lo verá. Jesús mismo nos dice esto. Si usted ha leído Mateo 24, sabrá que Él mismo describe este evento. En ese tiempo la señal del Hijo del hombre aparecerá en el cielo, y todas las naciones de la tierra se lamentarán. Verán al Hijo del hombre venir en las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Nadie se lo perderá. Aparecerá en todas partes con esa naturaleza única de la Divinidad que puede ser visible para todo el mundo alrededor de la tierra al mismo tiempo. Pablo llama a este suceso el resplandor de su venida (2 Tesalonicenses 2:8b), literalmente: la luz deslumbrante de su parusía.

Incluso los judíos lo reconocerán. Juan dice … y los que lo traspasaron. Esto es una referencia a la profecía en Zacarías 12, donde se nos dice que, cuando Él aparezca, aquellos que lo traspasaron lo mirarán y se lamentarán con gran lamento. Le preguntarán: ¿Qué heridas son éstas en tus manos?, y É l responderá: Las recibí en casa de mis amigos… (Zacarías 13:6).

Estuve con cierto número de rabíes debatiendo acerca de las diferencias entre el cristianismo y el judaísmo. Uno de ellos me dijo: Cuando venga el Mesías, los judíos dirán: Bienvenido, pero ustedes los cristianos dirán: Bienvenido otra vez. Y yo dije: Pero, ¿qué dirá el Mesías?. Él contestó, Creo que dirá: Sin comentarios. Uno de los enigmas de la historia ha sido por qué el pueblo judío ha vuelto la espalda con tanta determinación a la evidencia de que Jesús es Su Mesías prometido. Pero no será así para siempre. Llegará un día en que Israel reconocerá al Mesías. La profecía lo predice, y Jesús aquí lo confirma: y los que lo traspasaron lo verán ese día.

El tercer resultado es que todos los linajes de la tierra se lamentarán por causa de él. Creo que esto es una referencia a ese gran evento descrito en Filipenses 2. Allí se nos dice que para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre (Filipenses 2:10-11). Al final la gente se dará cuenta, ante la aparición del Señor mismo, de en qué posición han estado en relación con Él. Se lamentarán porque verán lo terriblemente que lo han tratado y Su obra por ellos en la cruz.

En el verso ocho es como si Dios tomase una pluma y, con Su propia mano, firmase este libro con Su propio nombre: Yo soy el Alfa y la Omega... el que es y que era y que ha de venir, el Todopodero. En ningún otro libro de la Biblia tenemos este maravilloso imprimatur de Dios. Dios ha firmado este libro con Su propio nombre y se ha identificado a Sí mismo para nosotros. Cuando leemos este libro estamos leyendo una copia autografiada por el Autor.

Gracias, Padre, por ese día que toda la creación anhela, cuando Tu Hijo regrese en gloria. Enséñame a vivir con expectación y disposición para el día en que lo vea. Amén.

Aplicación a la vida

¿Estoy viviendo hoy como si pudiera ser el último día antes de la vuelta de Jesús? ¿Es un día que anhelo o que temo?

Esta devoción diaria fue inspirada por un mensaje de Ray

Tras el escenario de la historia

Lea el mensaje de Ray